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Nuestras fortalezas 

La primera vez que acompañé un aborto avanzado recuerdo sentir que en aquel momento el único soporte que tenía era una llamada telefónica que tenía conmigo, “nadie busca embarazarse paraabortar”, me decía. “Ojalá que la sociedad dejara de mirarme como lo hace, con juicio y con estigma, yo sé que lo que hago lo hago por amor”. 

Ahí me di cuenta que aunque por fuera ella pareciera una persona frágil en realidad tenía raíces y cimientos grandes y resistentes. Aunque su árbol pareciera crecer frágil y curvo ella me enseño que no es tan sencillo como se aparenta, que hay infinidad de aspectos en nuestra vida que no nos permiten hacerlo “a tiempo”. 

Al terminar ella me dijo que parte de su cierre era hablar con el producto y besarle su frente antes de enterrarlo, ella era el más grande significado de grandeza y fortaleza, de coherencia y valentía. 

Aún cuando veamos una simple rama o árbol pequeño, no sabremos qué hay debajo de la tierra de cada uno de nosotros y sobre todo, que tenemos corazón.