Ponerse en el centro
La fotografía testimonial fue tomada por alguien desconocido, a quien se lo pedí, el día siguiente a mi segundo aborto. Cuando recibí la actividad pensé… Leer más »Ponerse en el centro
La fotografía testimonial fue tomada por alguien desconocido, a quien se lo pedí, el día siguiente a mi segundo aborto. Cuando recibí la actividad pensé… Leer más »Ponerse en el centro
La experiencia más significativa fue cuando acompañé a una mujer mayor que tenía la misma edad de mi mamá. La mujer tenía 5 hijos y… Leer más »La gran contención de una niña
Mi activismo comenzó porque ayudaba a conseguir arriendo de lugares para que pudieran hacer los procesos presenciales, pero aún no era oficialmente parte de la… Leer más »Esa niña que acompañé, era yo misma
Recuerdo en la pandemia, año 2020, a una mujer treintañera. Estaba muy determinada con su decisión, sus motivos eran muy fuertes como todas quienes deciden… Leer más »Me enamoré de acompañar
Sobre la pregunta 3, sobre alguna experiencia significativa que he tenido como acompañante, por qué significativa o qué emociones me provoca… Hice el ejercicio de… Leer más »Abrazos desde el encuentro
He estado pensando en una experiencia significativa, pero usualmente me cuesta escoger una opción entre muchas, en particular si es algo que me ha dejado… Leer más »Acompañar es transformarse en el abrazo
La experiencia más significativa fue acompañar a mi mejor amiga. Nos conocemos desde la infancia y hemos estado una junto a la otra en todo… Leer más »Aprender juntas
La primera vez que acompañé un aborto avanzado recuerdo sentir que en aquel momento el único soporte que tenía era una llamada telefónica que tenía… Leer más »Nuestras fortalezas
Una de las experiencias que he tenido es saber la capacidad que puedo tener para ayudar a más chavas. Sobre la información que puedo darles… Leer más »El orgullo de hacerlas sentir seguras
Me siento feliz de poder acompañar a las mujeres en la toma de sus decisiones y hacerlas sentir que no están solas. Así como también… Leer más »No están solas