Me parece que el mundo es un lugar demasiado hostil para las mujeres y personas con vulva. No hay lugar al cual voltear sin ver violencia y estas poblaciones en particular cargan con violencias muy específicas que siempre recaen en su sexo, género y su capacidad reproductiva.
Mi motivación para ser acompañante es hacer un poquito de contrapeso a este mundo y sistema corruptos para que poco a poco sea menos difícil para nosotrxs habitar en él.
En mi dibujo quise representar este entorno lleno de violencia que sólo es comparable con el caos que provocaría una pandemia zombie (tomando en cuenta que la misoginia es, a mi parecer, la más letal, antigua y normalizada de las pandemias).
Ser mujer o persona con capacidad de gestar te hace sentir adrenalina cada que sales de casa, es real el pensamiento de que tu vida corre peligro en cualquier instante; tal como si fuésemos sobrevivientes escapando constantemente, ocultandonos, atrincherándonos, entrenando formas de cómo defendernos (literalmente hemos llegado a cargar del diario navajas con nosotrxs cuando vamos camino a la escuela o el trabajo), sabiendo que cualquiera podría estar infectado del terrible virus y conocidos o desconocidos podrían asesinarte de un momento a otro. Puedes correr buscando ayuda pero sin importar a dónde vayas sólo encontrarás más peligros y obstáculos.
Sin embargo, dentro de las películas y videojuegos del género siempre están los grupos de apoyo y pequeñas comunidades que te brindan refugio, un lugar seguro… Estas personas te tranquilizan, te dan abrigo, curan tus heridas y te ayudan a escapar del peligro, ese es nuestro trabajo como acompañantes de aborto.
El aborto seguro, acompañado y amoroso es una alternativa para ayudar a la persona a sobrevivir y no tendría porqué ser recriminadx por ello.
(Además soy fanática del género de horror, en especial de los zombies y quería plasmar un poco mí en esta y en mis próximas entregas).
